Dados los eventos actuales, debo decir que: los humanos
deberían ser empáticos, pero el señor Holmes representa al antipático socio del
esclavista sistema capitalista que asola al planeta. Esos hombres y mujeres al
servicio del estado y la iglesia ¡Son hipócritas! Y que me caiga el peso de la
ley, pero no veo nada honorable en las personas en el poder, son mafiosos
amparados en leyes retorcidas y por personas uniformadas, y lo peor es que son justificadas
por la más baja clase social que no son los pobres, son los miserables lacayos en
semejante ejército que diezman y votan por la misma calaña que los oprime, y
dicen liderar por amor al prójimo cuando realmente se benefician a sí mismos
como empresa. Dicen que todo muerto es bueno, lo cierto es que ahora está de
frente a todas las víctimas del estado, ya no puede negar la violación de niñas
por parte del gloriosos ejército nacional, y su quién sabe qué tan larga lista
de desfachateces haya cometido con sus socios, pues el centro democrático no es
más que la fachada del paramilitarismo en este narco-estado. Podría pensar que
el señor es de élite, pero ellos no mueren en sus propias trampas a menos que
sean traicionados, y este señor fue muy obediente a los planes que, se extraña uno,
y más en esta época de pandemia donde la necedad más que la necesidad está
cobrando lo suyo, el plan marcha en forma. Lo que trato de decir es: los
políticos ya llegaron al tope de la corrupción, casos sobran para ilustrar la
codicia de los sinvergüenzas, esos impunes criminales que sacan del erario los
lujos que exhiben orgullosamente, detrás de la organización de los partidos políticos
está la misma clase social, ellos saben que no hay diferencia entre los zurdos
y derechos pues han visto al demonio que las extiende. Igual que pasa en ese
partido político gestado luego de pelear con el original partido de la “u” por
Uribe, quien discrepó y creo su centro demoniaco, a donde se fueron muchos de
los oligarcas convenientes a tales intereses particulares de privilegiados
seres que no son humanos, dejaron de serlo cuando vendieron su alma por un poco
de poder o lucro, pues en realidad la gente importa sólo como una estadística,
como una excusa para cobrar más impuestos. ¿Qué tiene que ver el exministro en
todo esto? Lo mismo que cualquiera que abre una cuenta en un banco para cobrar
un sueldo, como la tengo yo cuando no tengo otra opción que ser el inconforme
que desprecia a las personas que no sienten ese desdén hacia el engaño, y sea
que esté vivo o muerto, una persona que miente descaradamente merece aquello
que ha negado. No tengo nada contra el espíritu humano, es el ego lo que
fastidia a una persona, lo digo por la experiencia de una existencia contrapuesta
en la bondad humana y la iniquidad social, he visto en miradas el más tenebroso
odio y el más tierno afecto, presencié actos heroicos de las personas más
perdidas en la oscuridad; igual que la pedofilia sacerdotal se oculta como toda
esa red de influencias y torcidos que el capitalismo tiene a gran nivel, como las
corporaciones que hacen de todo para aparentar no ser un monopolio. Lo siento
por la familia del señor en cuestión, no soy un insensible, sé por lo que están
pasando al enterrar a un ser amado, yo también he pasado por ahí, y espero el
descarnado descanse en paz. Generalmente pensaría como Dante que, las personas
dadas a los pecados capitales no van al cielo, allí no hay envidia, soberbia, lujuria,
gula, mentira, pereza o avaricia y demás negocios que han convertido al ser
humano en un recurso más, carne de cañón o simplemente víctimas, pues aquí
asesinan líderes sociales casi que diariamente, la prensa es la publicidad de
los dueños y sus socios, propietarios de la salud y la educación, fichas claves
en su juego piramidal que llaman democracia y no es más que una cleptocracia.